En 2025, BorgWarner acelera su transición hacia la movilidad eléctrica, lo que implica reconfigurar su cadena de suministro para nuevos componentes como sistemas de enfriamiento de baterías. Con 12 plantas en seis estados y exportaciones a más de 60 mercados, debe garantizar trazabilidad total, eficiencia energética y cumplimiento normativo internacional. La logística se complica por la coexistencia de líneas de combustión interna y eléctrica, además de la creciente demanda de clientes chinos. La meta: una operación resiliente, descarbonizada y tecnológicamente integrada desde México.
