Banco Azteca enfrenta un reto estratégico en Recursos Humanos: integrar inteligencia artificial sin perder el enfoque humano.
En 2025, la IA se ha convertido en una herramienta clave para automatizar procesos como reclutamiento, evaluación de desempeño y capacitación. Banco Azteca, con más de 80,000 colaboradores, busca usar IA para agilizar tareas operativas, reducir sesgos y mejorar la experiencia del empleado. Sin embargo, el desafío está en mantener la empatía, la confianza y la cultura organizacional en un entorno cada vez más digitalizado.
La implementación de IA generativa exige nuevas competencias en el equipo de RH, desde gestión de datos hasta ética algorítmica. Además, la automatización puede generar resistencia interna si no se comunica con claridad. El área de talento debe equilibrar eficiencia con cercanía, evitando que la tecnología despersonalice procesos clave como entrevistas, retroalimentación o desarrollo profesional.
Banco Azteca apuesta por una “continuidad en el cambio”, donde la IA no sustituye al humano, sino lo potencia. El reto es diseñar una estrategia de RH que combine tecnología, inclusión y liderazgo, manteniendo el propósito social que distingue a la institución.
Además, Banco Azteca debe enfrentar el reto de alinear la IA con su propósito social, evitando que la automatización despersonalice el vínculo con sus colaboradores. La gestión del cambio es clave: se requiere una comunicación clara, formación continua y liderazgo empático para que el equipo de RH adopte la tecnología sin temor.
También surgen dilemas éticos sobre la privacidad de datos, el uso de algoritmos en decisiones sensibles y la equidad en procesos automatizados. RH debe convertirse en un área estratégica, capaz de traducir insights algorítmicos en acciones humanas, inclusivas y alineadas con la cultura de la organización.