Entrevista con Carlos Espinoza, director de consejo de Monarca Minerals, quien nos acompañó en una charla donde se tocaron temas de relevancia para el sector minero, actividad sumamente importante para el país.
“México es un país tradicionalmente minero” comenzó su participación el líder del sector, señalando la importancia de la actividad minera en el desarrollo industrial y económico de los países, especialmente en los tiempos de turbulencia, como tensiones políticas y sociales alrededor del mundo e inestabilidad económica.
Espinoza comenta que su proyecto de San José, es uno al que le guardan mucha fe y cariño, al tratarse de un proyecto que descubrieron y comenzaron desde cero, siendo la primera empresa trabajando en esa área con una concesión de más de 1500 hectáreas, donde el año pasado realizaron la primera perforación que lo clasificó de momento como un proyecto polimetálico.
Monarca Minerals asegura dar un uso correcto del agua en sus actividades, optando por subcontratar empresas perforistas y contrata pipas de agua para sus programas de perforación.
Carlos Espinoza recordó el tiempo en el que trabajó en la Bolsa de valores de Toronto, la más importante para el sector minero en el mundo, donde se recauda capital para tal vez más del 50% de las empresas de exploración minera, catalogada como una actividad de alto riesgo y que, asegura, no suele haber banco que le quiera prestar dinero a una empresa minera. Para esto, Espinoza también se dedicaba a asesorar empresas latinoamericanas para alistarse en Toronto y levantar capital en Canadá. “En México hay una oportunidad que no ha sido aprovechada” comentó al señalar que las empresas de exploración mexicanas no tienen acceso a capital en su territorio y pocos conocen que se les puede otorgar en otros países.
El Directivo habló de promover a México como una oportunidad integral en el sector, como un todo y no por partes. Entender que no se trata de una competencia entre estados de la República, sino que más bien se está compitiendo contra el resto del mundo.
Respecto a la tecnología que se utiliza para la producción, explotación y demás, actualmente hay mucho interés en llegar a una reducción del uso de agua y se desarrolla la automatización de equipos a control remoto para reducir el riesgo de los mineros. Cada vez existe más conciencia en la regulación y cierre de minas, para que el impacto ecológico sea el menor posible y el económico al dejar a trabajadores sin empleos, las empresas están tratando de ser más proactivas para desarrollar industrias que puedan trasladarse de proveedores de minería locales a otro tipo de proveedores, y que esto les permita, una vez que cierre la mina, continuar con la actividad económica en la región y seguir generando riqueza para la comunidad.
