Neruon Automotive Forum 2023
Este artículo se trata sobre la industria automotriz actual y todos los cabildeos que se requieren para llegar a un fin en común que es, la evolución tecnológica del vehículo del mañana.
Pero antes de ver hacia el futuro, volteemos a ver el pasado; de aquello que gira en torno a esta industria, el automóvil.
El término automóvil (del griego αὐτο “uno mismo“, y del latín mobĭlis “que se mueve“) es una tecnología que vio la luz hace 137 años, para ser exactos, en 1886 por Carl Benz, el cual inventó el primer carro de tres llantas, con combustión interna y que alcanzaba una velocidad de dieciséis kilómetros por hora.
Ahora, con este antecedente vislumbremos lo que se aproxima, el cual como resultado de un tiempo futuro su único resultado puede ser la evolución, que es sinónimo de transformación y que a su vez sumados son adaptación. Adaptación de los tiempos, adaptación de los materiales, adaptación de la sociedad, adaptación del cambio climático, que, partiendo desde este último punto, se puede decir que los números son alarmantes.
Los automóviles particulares generan el 18% de las emisiones de CO2 que es el principal gas causante del efecto invernadero. Pero cómo siempre en el mundo y a lo largo de los años hay gente que le interesa este tema.
El peso del vehículo es importante para la reducción de este gas. Las empresas tienen que cumplir con las metas de descarbonización y eso empieza con el punto anterior.
Para esto, empresas cómo Alian Plastics le apuestan a la integración de plásticos en diferentes partes del coche, esto, para reducir el peso del automóvil que cómo bien dijimos, es importante para reducir el CO2 de la atmósfera.
Consecuentemente también el subsecretario de economía del estado de Guanajuato nos comenta que se ha visto una tendencia de la incorporación de proyectos de inyección de aluminio a alta y baja presión, por gravedad y por under pressure.
Estas tecnologías permiten que los materiales del coche ya no sean los mismos que en 1886 cuando a Carl Benz se le ocurrió inventar un medio para poderse transportar.
Esta fecha se ve muy alejada a un lugar y tiempo, donde la ingeniería y la computación convergen en un futuro que desafía los límites de la imaginación. Donde la fusión de la tecnología y la movilidad están dando pie a una nueva era de autos inteligentes y sostenibles.
Ahora…¿México dónde se encuentra en este huracán de posibilidades infinitas?
Pues justamente, en el ojo.
México ha desempeñado un papel fundamental en la industria automotriz, siendo exportador de vehículos y componentes de éstos.
Todo esto, gracias a un concepto llamado nearshoring.
El surgimiento del nearshoring en México se remonta a la década de 1980, cuando el país comenzó a atraer inversiones extranjeras en el sector manufacturero, la implementación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994 también fue un factor determinante que impulsó la presencia de empresas extranjeras en el país.
Durante los años siguientes, el país se convirtió en un destino atractivo para las empresas de Estados Unidos y Canadá debido a su ubicación geográfica, mano de obra calificada y costos laborales competitivos y este flujo de inversiones contribuyó al crecimiento de la industria manufacturera y al desarrollo del nearshoring en México.
Pero en sí ¿qué es el nearshoring? Este concepto se refiere a una relocalización de las cadenas de suministro que vienen desde Asia u otros países que requieren reducir sus costos y por la ubicación y la manufactura de nuestro país, les es más conveniente traer sus maquilas, fábricas y hasta sedes de sus empresas a nuestra nación.
¿Cuál es la oportunidad en todo esto?
Felipe Villareal dice que el transformar algo que ya estaba estipulado, a veces cuesta al principio, pero hay que hacerlo pues uno no se puede quedar atrás en esta industria, siendo México un país que manufactura piezas para los vehículos y que hasta los ensambla, en ese mercado hay mucha tela de donde cortar.
Tan solo en Alian Plastics se compran resinas de diferentes partes de Europa y E.U.
Felipe se plantea por qué en lugar de hacer eso se abre mercado en nuestro país. Igual comenta que la inversión en tecnología debe ser un must.
Por otra parte el subsecretario de economía del estado de Guanajuato nos comenta que en el estado se logró la producción de más de 750 mil unidades cerca del 25% de producción de vehículos ligeros en México y para ellos significa el 75% de la capacidad productiva total. Si se suma a marcha forzada a 100% entre varias empresas automotrices se pudiera hablar de la producción de un millón de unidades tan solo en Guanajuato.
Actualmente vivimos en un mundo de evolución y de cambio constante; la industria automotriz ha resurgido de una manera rápida, en cuanto a evolución y tecnología. El futuro del plástico dentro de la industria automotriz es enorme. Entre el 2023 y 2030 el crecimiento de la industria del plástico en la automotriz va a ser de un 5.2% llegando a un negocio de 45 mil millones de dólares en el 2030.
Los plásticos de alto rendimiento están reemplazando a los metales convencionales. En cuanto a la innovación se ve mucha reingeniería del producto, de piezas metálicas a plásticas esto para aligerar el vehículo como ya lo habíamos visto pues es importante para el cuidado del medio ambiente, actualmente el plástico dentro de un auto tiene un peso de ciento diez y ciento veinte kilogramos.
Ahora, no solo se trata de las tecnologías sino también de la adaptación de éstas, adaptaciones que salen a la luz cuando ya no es posible generar más ventas. Es ahí donde la idea de la servitización genera nuevas ventas y oportunidades para innovar.
La servitización se define como una estrategia de índole empresarial basada en ofrecer servicios vinculados a un producto, de modo que el valor del negocio pueda derivar en la explotación de esos servicios logrando así un ingreso adicional a la venta del producto en cuestión.
Este concepto abre todo un nuevo abanico de oportunidades para la industria automotriz.
Por ejemplo, una empresa como Clarios, que se dedica a la producción de baterías, puede sacar provecho con esta idea de negocio a muy largo plazo pues es un círculo de nunca acabar.
Tú necesitas una batería, pero no solamente necesitas una batería si eres un repartidor de perecederos, lo que necesitas es la transportación, y como uno de esos componentes claves necesitas las llantas, la batería y algunos otros componentes críticos, que son indispensables para que el vehículo se mueva.
Y no solo eso, esta idea se agrega a las nuevas tecnologías que sirven también para que uno sepa el estado de todos los productos que puede generar una empresa, saber cuánto tiene de vida tu batería, que ésta no te deje varado, que puedas tener métricas, etc.